Este lunes quedó demostrado una vez más que el amor y pasión de la afición de Rayados por su equipo no tiene límites, ya que pese a que cambió de aires, al dejar El Barrial, para entrenar en el Estadio de Béisbol Monterrey, casa de los Sultanes, acudieron para apoyarlos alrededor de 15 mil seguidores.
Tal asistencia en día de asueto, sorprendió al propio técnico Víctor Manuel Vucetich y a sus jugadores, incluso, a los directivos y peloteros de la novena regiomontana que estuvieron presentes.
Y es que en un principio se tenía programado abrir solamente la zona de general, que corresponde al área de los jardines del "Palacio Sultán", la cual tiene capacidad para 10 mil personas, pero ante la gran demanda de aficionados, se tuvo que dar acceso a las gradas en el segundo y tercer piso.
Para acceder al entrenamiento se formó una fila de 200 metros sobre el estacionamiento del estadio, llegando las hileras de seguidores rayados casi hasta el Universitario, casa de los Tigres.
Ésta es la segunda vez que el cuadro albiazul dejó el rectángulo de una cancha de futbol, por el diamante del béisbol, ya que en el torneo de Verano 2002, cuando los dirigía José Treviño, realizaron una práctica en este escenario.
En aquella ocasión el delantero regiomontano Antonio de Nigris, quien falleció en noviembre del 2009, se lució como pitcher, ya que el béisbol fue uno de los deportes que practicó de niño.
SE LUCIERON OROZCO Y ARELLANO EN EL BAT
Ahora, los jugadores rayados que "brillaron" en el diamante fueron los regiomontanos Jesús Arellano y Jonathan Orozco; el arquero lo hizo tanto en la lomita de los lanzamientos como en el bat.
Después de terminar la práctica regenerativa en el área de jardines, los jugadores se dispusieron a ocupar sus lugares en el campo de juego.
El guardameta se enfundó en una camisola de los Sultanes, agarró el guante y la pelota y comenzó a realizar lanzamientos al pelotero, su tocayo Jonathan Castellanos, así como a Edwin Salas.
Enseguida el "Cabrito" agarró el bat y aunque en un principio batalló para encontrar la bola, al final encontró varios envíos que logró batear hasta los jardines; minutos más tarde lo hizo Orozco, quien también mostró cualidades en el bat.
Tal asistencia en día de asueto, sorprendió al propio técnico Víctor Manuel Vucetich y a sus jugadores, incluso, a los directivos y peloteros de la novena regiomontana que estuvieron presentes.
Y es que en un principio se tenía programado abrir solamente la zona de general, que corresponde al área de los jardines del "Palacio Sultán", la cual tiene capacidad para 10 mil personas, pero ante la gran demanda de aficionados, se tuvo que dar acceso a las gradas en el segundo y tercer piso.
Para acceder al entrenamiento se formó una fila de 200 metros sobre el estacionamiento del estadio, llegando las hileras de seguidores rayados casi hasta el Universitario, casa de los Tigres.
Ésta es la segunda vez que el cuadro albiazul dejó el rectángulo de una cancha de futbol, por el diamante del béisbol, ya que en el torneo de Verano 2002, cuando los dirigía José Treviño, realizaron una práctica en este escenario.
En aquella ocasión el delantero regiomontano Antonio de Nigris, quien falleció en noviembre del 2009, se lució como pitcher, ya que el béisbol fue uno de los deportes que practicó de niño.
SE LUCIERON OROZCO Y ARELLANO EN EL BAT
Ahora, los jugadores rayados que "brillaron" en el diamante fueron los regiomontanos Jesús Arellano y Jonathan Orozco; el arquero lo hizo tanto en la lomita de los lanzamientos como en el bat.
Después de terminar la práctica regenerativa en el área de jardines, los jugadores se dispusieron a ocupar sus lugares en el campo de juego.
El guardameta se enfundó en una camisola de los Sultanes, agarró el guante y la pelota y comenzó a realizar lanzamientos al pelotero, su tocayo Jonathan Castellanos, así como a Edwin Salas.
Enseguida el "Cabrito" agarró el bat y aunque en un principio batalló para encontrar la bola, al final encontró varios envíos que logró batear hasta los jardines; minutos más tarde lo hizo Orozco, quien también mostró cualidades en el bat.
Otros elementos que participaron en la "cascarita de beis" contra jugadores de la novena regiomontana fueron Darío Carreño, Sergio Pérez, Jesús Zavala y William Paredes, esto mientras el estratega Vucetich platicaba con el coach de bateo sultán, Jack Pierce.
Así, mientras Rayados se divirtió en el campo, su afición lo hizo desde las gradas, donde hicieron la ola, cantaron contra los Tigres, al entonar "hay que saltar, hay que saltar, el que no salte, se va al 'Volcán'", además de gritar los nombres de jugadores, en especial de Orozco y Walter Ayoví.
"Siempre hay que tratar de traer un poquito de alegría; es bonito convivir con otro tipo de deportistas y darle alegría a la afición, que siempre nos han demostrado el cariño que nos tienen, no hay un entrenamiento donde estemos solos.
"Es divertido (jugar béisbol), ojalá que Sultanes pueda ir un día a El Barrial a jugar futbol", dijo el cancerbero al término del entrenamiento
.
Así, mientras Rayados se divirtió en el campo, su afición lo hizo desde las gradas, donde hicieron la ola, cantaron contra los Tigres, al entonar "hay que saltar, hay que saltar, el que no salte, se va al 'Volcán'", además de gritar los nombres de jugadores, en especial de Orozco y Walter Ayoví.
"Siempre hay que tratar de traer un poquito de alegría; es bonito convivir con otro tipo de deportistas y darle alegría a la afición, que siempre nos han demostrado el cariño que nos tienen, no hay un entrenamiento donde estemos solos.
"Es divertido (jugar béisbol), ojalá que Sultanes pueda ir un día a El Barrial a jugar futbol", dijo el cancerbero al término del entrenamiento
.
No hay comentarios:
Publicar un comentario